jueves, 2 de enero de 2014

Los cimientos

Tenía como 15 años cuando en la unidad donde vivía se desato el "cristianismo", se esparció por muchas de las casas de mis amigos y otros conocidos de poca confianza. Todos parecían haber cambiado y llamados por Dios a su servicio. Pasaron solo 2 años cuando aquellas personas las cuales parecían no untarse de este mundo estaban comportándose peor que antes, aun que debo reconocer que otros duraron mas con esta endeble convicción.
En estos días y unos pocos años atrás parece que esta extraña moda por llamarlo de una manera que me parece adecuada, estoy viendo lo mismo. Sus palabras se las ha llevado el viento y sus cimientos parecen hechos de papel que se desase a la intemperie y con el transcurrir del tiempo.
Se hace evidente que los Cristianos son pocos y los que van a una iglesia cristiana son muchos.
Que pasó con esas manos levantadas hacia a Dios y ahora levantadas bajo unas fuertes luces y un estridente y vulgar ruido de reguetón. Embarazos que Dios quiso evitar y que ahora irrumpen en las vidas de niñas y mujeres ya con pocas posibilidades de estudiar y glorificar a Dios con la cara en alto. Esos consejos y enseñanzas se quedaron en sus orejas pero jamás entraron al oído y mucho menos a su corazón.
Con la boca con la que antes bendecían a otros y adoraban al Padre de los cielos, ahora maldicen y pronuncian palabras feas e hirientes que parecen nunca haber adorado a Dios.
Me quedo corto y este espacio no alcanza para mencionar el sin fin de situaciones, drogas, violencia, etc.
Quienes somos para juzgar, pero quienes somos no jalar las orejas y mostrarte la verdadera "iglesia". No caigamos en esto, aun que por mi parte me siento muerto sin Dios.

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